Aunque reír es arriesgarse a parecer un tonto.
Aunque llorar es arriesgarse a parecer sentimental.
Aunque acercarse a alguien es arriesgarse a involucrarse.
Aunque mostrar tus sentimientos es arriesgar tu yo interior.
Aunque exponer tus ideas o tus sueños a una multitud es arriesgarse a perderlos.
Aunque amar es arriesgarse a no ser amado de la misma manera.
Aunque vivir es arriesgarse a morir.
Aunque desear es arriesgarse a ser defraudado.
Aunque intentar es arriesgarse a fallar.
A pesar de todo, debes arriesgarte.
Debes correr los riesgos simplemente porque el más grande de los peligros de la vida es no arriesgarse.
Las personas que no arriesgan nada o nunca tienen nada, no hacen nada.
Tal vez podrán evitar el sufrimiento y la tristeza, pero no logran aprender, sentir, cambiar, crecer o vivir. Prisioneros de sus temores, son esclavos que han renunciado a su libertad, pues sólo cuando una persona se arriesga, es libre.
Los pesimistas se quejan del viento; los optimistas esperan confiadamente que los vientos cambien de dirección y los realistas, ajustan sus velas en la dirección correcta.
Arriésgate.
Es cierto que puedes perder, pero... ¿Has pensado en lo que puedes ganar?
No te quedes inmóvil
ResponderEliminaral borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo
pero si
pese a todo
no puedes evitarlo
y congelas el júbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados
pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil
al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo.